Wednesday, June 17, 2015

LA ELEVACIÓN ESPIRITUAL . por el Prof. Jorge Raúl Olguín


LA ELEVACIÓN ESPIRITUAL 
.
por el Prof. Jorge Raúl Olguín 
.
Para elevarse espiritualmente,

 no es suficiente con tener pensamientos puros. 

No basta con meditar horas y horas,

 ni alcanza con pensar que estamos cerca de Dios.

 Esto sería elegir el camino más fácil,

 el más simple.

Tampoco nos elevamos espiritualmente pasando al otro extremo,
 o sea, buscando una relación material donde canalizar nuestro amor,
 o lo que creemos que es amor.

En ambos casos estaríamos siendo egoístas porque,

 si nos ponemos a meditar aislados de todo,
 no le servimos a nadie,
 ni siquiera a nosotros mismos.

 Y si buscamos a alguien a quien necesitar, tampoco somos útiles, porque amar es dar y no pedir.

Solo te puedes elevar espiritualmente si canalizas el verdadero amor.

¿Cómo reconoces ese amor tan puro?

 Viendo a Dios en tu semejante,
 pero viéndolo dentro de la persona.
 No será una tarea sencilla,

 pues todos estamos condicionados a ver la fachada de la persona y la aceptamos o la rechazamos de acuerdo con la primera impresión.

 No vamos a ver su espíritu, no vamos a sentir su energía, no vamos a escuchar sus pensamientos, no vamos a valorar su amor impersonal.

 No...

 solo vamos a ver su exterior y vamos a juzgar a la persona según ese exterior.

Y te equivocarás...

 y cometerás el error de buscar la afinidad en un rostro, en unos ojos(que tal vez no reflejen ningún alma).

 Y quizás te encandiles por un cuerpo joven, y creas que esa vibración es la que te hará crecer.

 Y después notarás que estás igual, o peor. 


Tal vez tu ser no esté preparado todavía para ver a Dios en ese otro ser semejante a ti.

 Tal vez dejes pasar la oportunidad de crecer espiritualmente, mezclándote con la energía de esa persona.


Como alguien dijo una vez:

 todos tenemos un camino sembrado de colores en nuestro destino, colores que son pintados por un amor impersonal.

 Pero, a veces estamos encandilados por un falso sol y no alcanzamos a ver esos colores.

 Y no ascendemos... 

y no nos elevamos espiritualmente al no canalizar la esencia divina de esa alma afín.

 Y nos transformamos en uno más del montón,

 donde solo sobresale lo material, donde triunfa el dolor, el fracaso, la mentira...

Donde llegamos a confundir : 

vivir con sobrevivir...

y nos metamorfoseamos en ser conformistas... 

y nos aletargamos...

 y nos acostumbramos a las cosas comunes.

 Y un día, quizás nos llegamos a olvidar que tuvimos una inquietud, que quisimos algo.


¿Qué era?

 No sé,

 algo que pensamos que nos pondría mal

 (porque siempre se tiene miedo a crecer),

 algo que no nos atrevimos a experimentar 

(porque es más fácil entregarse a la materia que al espíritu). 

Y el tiempo pasa... 

y nos transformamos en un punto...

 rodeado de millones de puntos...

 y miraremos el cielo...

 y una angustia se apoderará de nuestra alma...

 y no sabremos por qué...

 y buscaremos por fin ese abrazo... 

Y será voluntad de Dios,

 el que todavía estemos a tiempo.
*

No comments: