PREGUNTAS SOBRE LAS INTERMINABLES COLAS:
La “institucionalización” de las colas es el fenómeno sociológico más interesante del reciente proceso político…
Lo digo desde una posición sólo observante,
porque en los últimos tiempos ya no me atrevo a afirmar o negar nada…
Cada vez tengo más preguntas sobre la asombrosa capacidad de la gente para soportar estoicamente horas y horas.
1) ¿Por qué las ventas siempre comienzan tardíamente en las horas de más sol y calor?
2) ¿Cómo es que todavía no hay un registro informático de cada comprador y así siempre los mismos abruman cada supermercado, farmacia, ferretería, habiéndose creado una categoría de favorecidos que siempre consiguen de todo y otros que nunca consiguen nada?
3) Cuando finalmente se produzca la inevitable sinceración económica: ¿Qué va a pasar con esas familias numerosas que en cambote han dejado sus empleos para dedicarse a comprar y revender?
4) ¿No será posible hacer un estudio de la circulación de ese dinero, las cuantiosas sumas amasadas con la reventa de productos? ¿Surgirá de allí una clase social emergente? ¿Está aumentando la propensión media al ahorro o al consumo?
5) En los casos de compras nerviosas: ¿cuánto arroz, harina y pollo cabe en una casa o apartamento?
6) ¿No será posible que el Estado tan garantista y proteccionista le otorgue una tutela a tanta gente que por largos meses, incluso años, no ha logrado comprar nada regulado en ningún supermercado de toda Venezuela?, esa lista es fácil hacerla, especialmente como están las cosas aquí …
Advertencia, ya ni me molesto en criticar las colas, sólo intento comprender la idiosincracia y factores sociológicos de su entorno y espero respuestas de altura, no la vacía repetición de consignas…
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La “institucionalización” de las colas es el fenómeno sociológico más interesante del reciente proceso político…
Lo digo desde una posición sólo observante,
porque en los últimos tiempos ya no me atrevo a afirmar o negar nada…
Cada vez tengo más preguntas sobre la asombrosa capacidad de la gente para soportar estoicamente horas y horas.
1) ¿Por qué las ventas siempre comienzan tardíamente en las horas de más sol y calor?
2) ¿Cómo es que todavía no hay un registro informático de cada comprador y así siempre los mismos abruman cada supermercado, farmacia, ferretería, habiéndose creado una categoría de favorecidos que siempre consiguen de todo y otros que nunca consiguen nada?
3) Cuando finalmente se produzca la inevitable sinceración económica: ¿Qué va a pasar con esas familias numerosas que en cambote han dejado sus empleos para dedicarse a comprar y revender?
4) ¿No será posible hacer un estudio de la circulación de ese dinero, las cuantiosas sumas amasadas con la reventa de productos? ¿Surgirá de allí una clase social emergente? ¿Está aumentando la propensión media al ahorro o al consumo?
5) En los casos de compras nerviosas: ¿cuánto arroz, harina y pollo cabe en una casa o apartamento?
6) ¿No será posible que el Estado tan garantista y proteccionista le otorgue una tutela a tanta gente que por largos meses, incluso años, no ha logrado comprar nada regulado en ningún supermercado de toda Venezuela?, esa lista es fácil hacerla, especialmente como están las cosas aquí …
Advertencia, ya ni me molesto en criticar las colas, sólo intento comprender la idiosincracia y factores sociológicos de su entorno y espero respuestas de altura, no la vacía repetición de consignas…
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